El 26 de julio de 1986 Andrés Martínez, un experimentado
conductor, y su esposa Carmen Gómez, viajaban en la cabina de un enorme camión
cisterna rumba a Bilbao, España. El cargamento: 20,000 litros de ácido
sulfúrico. .
De forma inexplicable, aquel experimentado camionero
emprendió el descenso del puerto de Somosierra, la pendiente es muy prolongada
y la velocidad a la que el iba era suicida. A la altura del límite entre Madrid
y Segovia se produciría lo inevitable: El accidente que involucraría a otros
tres autos... El camión cisterna que transportaba el ácido era un montón de
fierros retorcidos por el que corrían los miles de litros de ácido abriéndose
paso rumbo a las laderas del río Duratón.
La cabina del camión había sido aplastada por la pesada
cisterna y el ácido mortal caía sobre los cuerpos de los esposos Andrés
Martínez y Carmen Gómez. Pero descubrieron que habia una tercera persona que
viajaba en el camion, y decidieron buscarlo sin cesar porque los abuelos de
Juan Pedro denunciaron la desaparación de este.Ante el infructuoso rastreo, la
primera hipótesis que se deslizó fue que el cuerpo del pequeño Juan Pedro había
sido disuelto por el ácido, pero esta teoría fue desechada por los expertos químicos,
quienes afirmaron que un cuerpo humano no podía evaporarse a causa del ácido
sin dejar algún rastro. En todos estos años, la hipótesis de un secuestro ha
cobrado fuerza, ya que se hace difícil pensar que un vehículo apenas salido de
una revisión total como la cisterna sufriera algún desperfecto mecánico.
Entonces, la lógica nos puede llevar a pensar que la ex-cesiva velocidad de la
cisterna se debía a un desespe-rado intento de dar alcance a otro vehículo.
Al no encontrar una solución a este caso, disparatadas
conclusiones salen a la luz, como por ejemplo que Juan Pedro fue trasladado a
otro plano dimensional, a un punto en el espacio y el tiempo donde se encuentra
encerrado. La verdad a ciencia cierta aun no se sabe, pero lo único que no se
puede negar en que todo intento de búsqueda fue infructoso. La única prueba que
muestra que el pequeño Juan Pedro estuvo en la cabina de la cisterna, es un
zapato que le pertenecía... Tal vez por eso sigue siendo uno de los Enigmas y
Misterios que mas atrae a los investigadores de lo inexplicable.
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